Soledad Alvear desconfió de la "desafección cada vez mayor" de Lavín con
Pinochet, mientras Bachelet espera que no sea sólo una estrategia de campaña. En tanto,
la UDI y RN tuvieron una dispar reacción.
Un amplio debate se desató luego de la declaración del candidato
presidencial de la Alianza, Joaquín Lavín, que afirmó que si hubiera sabido de las
violaciones a los Derechos Humanos durante la dictadura y las cuentas secretas de Augusto
Pinochet no habría votado por el Sí en el plebiscito de 1988. Mientras en la
derecha las posturas de la Unión Demócrata Independiente y Renovación Nacional fueron
divergentes, las presidenciables de la Concertación, Soledad Alvear y Michelle Bachelet,
cuestionaron con matices este desmarque del ex funcionario de Odeplan con la dictadura.
El presidente de la UDI, Jovino Novoa, consideró errada la postura de Lavín,
afirmando que él "no hubiese contestado esa pregunta", porque "uno no
puede cambiar los hechos de la historia". "Uno no puede contestar respecto de
una situación que habría podido pasar hace 15, 16 o 17 años atrás, si se hubiera
sabido esto o esto otro", sostuvo el senador.
En el mismo tono se refirió el vicepresidente de la colectividad, senador Juan Antonio
Coloma, quien en entrevista con radio Cooperativa, llamó a asumir los hechos del
plebiscito, destacando que en su sector hubo una lógica positiva en el apoyar
la permanencia de Pinochet, por ocho años más.
Es complicado. Yo creo que uno nunca puede colocarse en situaciones de qué es lo
que hubiera hecho si hubiera conocido otros antecedentes. Yo creo que la historia se
escribe como se escribe y la historia se escribió en la lógica de haber votado, en el
caso mío, afirmativamente en el plebiscito, dijo el parlamentario.
De inmediato defendió esa opción, al agregar que tal actitud contribuyó a consolidar
la institucionalidad democrática a través de la Constitución, que, dicho sea de paso,
con el paso de los años, más allá de las reformas, uno se da cuenta que es un
instrumento muy potente para alcanzar que el país funcione.
Al contrario, el diputado del mismo partido Mario Varela dijo coincidir con las
declaraciones de Lavín afirmando que la situación de Pinochet "es un tema que nos
tiene a muchos decepcionados".
"A quienes no sólo simpatizamos, sino que también colaboramos en esa época con
el Gobierno Militar, ya sea dando el voto o difundiendo lo que había sido una obra que
tampoco hoy se puede poner en discusión como logro de crecimiento para el país (...) La
gente que ayudó a Pinochet cuando estuvo en Londres se debe sentir traicionada",
agregó, entrevistado por radio Universo.
Por su parte, el secretario general de Renovación Nacional, Cristián Monckeberg,
apuntó a la misma emisora que "nosotros lo hemos señalado y está claro que el ex
Presidente Pinochet cometió gravísimos errores de manejos de plata. Eso lo hemos dicho,
lo reconocemos, lo asumimos y lo criticamos, pero también hay que ser justo que en este
gobierno ha habido mala administración. Por eso nosotros hemos dado a conocer las cifras,
incluyendo los montos en materia de corrupción del caso Riggs".
Indicó que "nosotros, al interior de Renovación Nacional, tenemos mucho respeto
de lo que fue el gobierno militar. Nos tocó hacer una encuesta sobre todo el proceso de
modernización y preguntamos por la obra de ese gobierno y claramente la gente lo respeta,
pero es muy critico. Esa encuesta fue a nuestros militantes y nuestros dirigentes y es lo
que corresponde. Nosotros creemos que si se cometieron errores que se critiquen y sean
censurados".
Hablan las candidatas
En la Concertación, fueron las precandidatas las que llevaron la batuta de las
reacciones ante el giro lavinista. Ambas manifestaron sus aprehensiones sobre la
"creciente desafección y alejamiento" del abanderado de la Alianza por Chile,
Joaquín Lavín, hacia el gobierno militar y la figura del general (r) Augusto Pinochet.
La ex canciller instó a la ciudadanía a "reflexionar y cuestionar la
confiabilidad" del ex alcalde de Santiago, y tildó su nueva postura de una
tremenda incoherencia.
"Ha pasado mucho tiempo y ahora, a las puertas de una elección presidencial,
Lavín reconoce algo que reconocen todos los chilenos", dijo la carta DC en alusión
a las violaciones a los derechos humanos durante el régimen militar.
"Es increíble esta conducta de Joaquín Lavín. Pasaron muchos años, el Informe
Rettig, la Mesa de Diálogo, el Informe sobre Prisión Política y Tortura y recién
ahora, después de 15 años, asume una realidad indesmentible", enfatizó Alvear.
Por su parte, la ex ministra de Salud y Defensa asumió una postura más flexible y le
concedió el "beneficio de la duda'' a Joaquín Lavín. sin embargo, dijo esperar que
sus palabras reflejen "un sentimiento profundo", y no sea una mera táctica de
campaña.
"No soy prejuiciosa en la vida. Creo que la gente también aprende. Estamos en
campaña presidencial y espero que estas no sólo sean palabras de estrategia política,
sino palabras que expresen un sentimiento profundo", añadió Bachelet.