Puro Chile - 6 marzo 2007
ESTADOS
UNIDOS
EL
DOBLE JUEGO:DIPLOMACIA Y FUERZA
Frida
Modak
La
secretaria de Estado Condoleeza Rice ya había anticipado que en la política
exterior estadunidense se empezaría a hablar de diplomacia y así está
ocurriendo, pero en el tradicional
doble juego que sigue Estados Unidos en la defensa de sus intereses.Ese juego se
ha aplicado tanto para derribar gobiernos legítimos que no son del agrado de
Washington, como para iniciar y mantener las guerras que emprenden.En el
lenguaje de las agencias de inteligencia del norte esa forma de operar este
doble juego se realiza a través del Track I y Track II.
Cuando
se trata de someter o derrocar gobiernos el Track I empieza con
presiones y acciones desestabilizadoras en todos
los
órdenes,si eso fracasa se recurre a los golpes militares,Track II.Si se trata
de defender los infinitos “intereses estratégicos” estadunidenses, que se
encuentran en toda la tierra,el espacio,la luna y el planeta que se les ocurra,
entonces se declara que se combate a un dictador que viola los derechos humanos,
protege al terrorismo, lo que amenaza a todo el mundo, y lo que ya conocemos.Se
recurre a los organismos internacionales para que lo sancionen,ese es el Track I
,y si no se logra el apoyo internacional,se invade como ha ocurrido en Afganistán
e Irak,ese es el Track II.
Fracasada
la guerra declarada de hecho a esos dos países,doña Condoleeza ha armado un
tinglado que podría ser una tabla de salvación para el presidente George Bush
y para ella, o bien otra forme de repetir el juego de los Tracks,para ampliar la
guerra.La funcionaria ha viajado por todos los países del Medio Oriente y el
gobierno iraquí, elegido en comicios manejados por Estados Unidos,ha sido
presionado hasta el extremo para
que actúe en función de las conveniencias estadunidenses y no de las iraquíes,al
punto de que el Primer Ministro
Nuri al-Maliki,llegó a decir que es amigo de Washington pero no es el hombre de
Estados Unidos en Irak.
No
es extraño,entonces, que el martes 27 de febrero Rice dijera, antes de
comparecer a un comité del senado de su país,que el gobierno de Bush y el de
Irak invitarían a Siria e Irán a “una reunión entre vecinos” para
estabilizar a Irak y,con la tradicional prepotencia,la secretaria agregó que
tenía la esperanza
de que “estos gobiernos aprovechen la oportunidad que se les brinda
para mejorar las relaciones con Irak y trabajar por la paz y la estabilidad en
la región”.Al día siguiente el gobierno iraquí invitó a esos dos países a
una conferencia internacional para la paz en Irak, e invitaba también a Turquía,Arabia
Saudita,Kuwait y Egipto,y a los cinco países con derecho a veto en el Consejo
de Seguridad de la ONU: Rusia, China, Gran Bretaña, y Francia.El primer
ministro Al-Maliki,espera que también participen la Liga Árabe y la
Conferencia Islámica
EL
CONTEXTO
Hecha
pública la invitación, los estadunidenses, gentilmente, dijeron que participarían
en la reunión,como si ellos no la hubieran inventado.La Rice puso el acento en
que Irak había invitado a Irán y Siria,pero acto seguido informó que tras la
primera reunión que se efectuará el 10 de marzo en Bagdad se realizará otra a
nivel ministerial en abril.Por su parte, el vocero de la Casa Blanca dijo que no
había cambio de política hacia Irán
porque “no hay fisuras” en la diplomacia de su país y sostuvo que Irán
debe renunciar al enriquecimiento de uranio si quiere que Estados Unidos acepte
negociar con sus representantes en un ámbito multilateral.
Resulta
obvio que la administración Bush está buscando una salida a los muchos
problemas que enfrenta.La Cámara de representantes ya rechazó sus planes para
Irak y sus aliados están retirando las tropas que enviaron a ese país luego de
la invasión,Gran Bretaña es uno más de los que se van.Pero ya se han ido España,
Honduras,Nicaragua, República Dominicana, Filipinas, Noruega, Tailandia, Hungría,
Portugal, Polonia, Ucrania,
Holanda, Italia, Bulgaria, Japón y Corea del Sur. En lo que va corrido de este año
la República Checa anunció su retiro, al que se suma el de Dinamarca y el de
los británicos, aunque estos últimos manden al príncipe Harry “a la guerra”.
Por
si no fuera suficiente, ya no es posible seguir ocultando que la situación en
Afganistán no es mejor. Invadieron ese país asegurando que encontrarían a
Osama ben Laden, presunto autor intelectual de los sucesos de 2001, pero no han
encontrado ni una huella. Por su parte, los afganos siguen rechazando a las
tropas estadounidenses y de la OTAN y se pronostica que con el término del
invierno incrementarán sus acciones contra los invasores. Las presiones sobre
los presidentes de Afganistán y Pakistán no sirven de nada, porque Bush sigue
sin entender ni aceptar que los propios mandatarios no pueden congratularse de
la agresión y la coerción de que han sido objeto.
Ni
siquiera es posible saber si el estallido de una bomba en la base aérea
estadunidense de Bagram,en Afganistán,donde se alojaba el vicepresidente
Cheney,fue real o sólo una manera de decirle a los países europeos de la OTAN
que no pueden retirar a sus soldados.Y, por otra parte, no deja de llamar la
atención que la reunión cuya
paternidad se atribuye al gobierno de Irak haya sido convocada cuando el
presidente de ese país estaría grave en un hospital de Jordania,según la
información oficial,versión desmentida por su hijo.
¿CUÁL
ES LA META?
La
administración Bush dice que no ha cambiado su posición frente a Irán y
Condoleeza Rice intenta que sea el gobierno iraquí el que cargue con el fracaso
de la reunión de marzo si éste se produce.Cabe preguntarse entonces si el propósito
de esta movida es justificar otra guerra de hecho, esta vez contra Irán.El
mandatario del norte ha dado suficientes muestras de que no quiere salirse de
Irak,pero cada día que pasa recibe nuevas pruebas del absoluto rechazo a sus
planes.
A
la resolución de la Cámara de Representantes se agrega el resultado de la
encuesta de Post/ABC News dada a conocer el martes pasado y según la cual
el 53 por ciento de los estadunidenses quiere que se fije la fecha de
retiro de las tropas de Irak.El 56 por ciento se opone al envió de 21 mil 500
soldados más.El 64 por ciento dijo que no
valía la pena pelear en Irak y en cuanto a limitar fondos para la guerra, el 51
por ciento se opuso,pero el 46 por ciento estuvo
de acuerdo en que se hiciera.
Irán
asistirá a la conferencia
convocada con Irak si eso ayuda a los iraquíes,pero no considera necesaria la
participación de los cinco del Consejo de Seguridad.Tampoco renunciará a su
programa nuclear, menos cuando el diario inglés The Guardian informó el 23 de
febrero que fuentes diplomáticas de la Agencia Internacional de Energía Atómica
señalaron que muchos elementos aportados por Washington sobre el programa
nuclear iraní son “infundados”,con lo que se estaría repitiendo
lo sucedido cuando se acusó a Irak de tener armas de destrucción
masiva.Mientras tanto,Irán,para disgusto de Washington, amplía sus relaciones
comerciales con ocho países latinoamericanos y realizó el martes último una
conferencia sobre la importancia de América Latina en “el futuro orden
internacional”.
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