CRONICAS DE UN REPORTERO9 de mayo 2009 (POR MARIO A. GOMEZ LOPEZ) SANTIAGO DE CHILE.- Es un
país largo, flaco, distante, con mirada a los cuatro puntos
cardinales, famoso porque es larguirucho. Empieza en un morro en
el norte y termina en la antártica en el sur, y por ahí podemos
iniciar una vuelta o revuelta al mundo llevando o trayendo lo
mismo como en casi todas partes del mundo: negocios, inversiones,
ganancias, pérdidas y productos en ocasiones raros, novedosos
porque Allí el mundo se juega ante el peligro de los deshielos y hacen hoyitos imperialistas para descubrir un mundo nuevo para el apetito insaciable de los inversionistas de otras latitudes. Somos un producto capitalista, pero las necesidades y las ideas de su pueblo total y mayoritario de la clase trabajadora, fuimos luchadores fieros contra los invasores y acogedores, buenas personas y solidarios de verdad con los trabajadores de otras latitudes, pero en particular en nuestro continente sureño. Los países como este
larguirucho Chile, tiene su historia heroica con sus indígenas
mapuche que defendieron el lugar en que vivían de la invasión
de Chile es hoy una democracia desordenada, convaleciente a medias de una dictadura de casi 20 años bajo la tutela imperial de USA y Gran Bretaña, cuando era el sol del modelo y el lejano oriente una vertiente de cultura, de guerras y revoluciones con vuelta de campana incluida.. Todos, unos más que otros, influyeron en el sueño de las masas con desfiles interminables y líderes que hoy tienen descendientes al más puro estilo de Wall Street. Nunca un sueño –desordenado pero sueño al fin- ha muerto sin almohadas ni colchones en medio de lo que Pinochet transformó en un cuartel de torturas y asesinatos con la complicidad de los que en este representan a la democracia de ellos. Chile es, en suma, un recuerdo feliz por sus luchas y muy infeliz por su hoy, donde la modernidad son los hoyos para descubrir más minerales para el resto del mundo, salmones helados en las afueras del Polo Sur y una “pujante” sociedad de hombres que administran esa riqueza con aviones privados propios que los conectan con ganancias monetarias gigantescas, Tener un avión privado es como disponer de monopatín para un niño de población del tercer mundo. Chile es hoy un balneario para turistas y para criollos que disponen de playas y haciendas propias como en N.York y el resto del mundo rico, con estacionamientos privados y como pasatiempo menor compran equipos de futbol. Esta rareza la iniciaron los árabes petroleros, y religiosos al mismo tiempo, en Inglaterra y Francia. En Chile sólo les alcanza para comprarse a Colo Colo con un candidato presidencial moderno con una fortuna personal que merodea los mil quinientos millones de dólares, Este es un detalle que marca la incorporación de Chile al mundo globalizado de los multimillonarios que compiten anualmente en encuestas sobre cual de todos es el más rico, pero rico, del mundo. Esta olimpíada de descaro para los nuevos ricos del cono sur la encabeza Piñera, vendiendo tarjetas de crédito Bancard que nunca fueron liquidadas en el Banco Central. Es un descamisado por su desorden y por sus ambiciones, dejando a sus satélites cuidando sus millones o simulando que él no los tiene ni los utiliza, que los mandó guardar para que “empollen”. Este es el mundo y el submundo de un país con paciencia larga como su territorio al que ahora las viejas izquierdas se afrancesaron o se españolizaron bajo el liderazgo armado de la represión de Pinochet en Chile. Naciones Unidas condenó l6 veces en sus Asambleas anuales los crímenes que cometieron sin pausa los uniformados chilenos durante la dictadura de Pinochet, en alianza con Nixon y Kissinger. El exilio de los que pudimos escapar de Chile cuando Pinochet inauguró su carnaval de robos y asesinatos, más torturas y exilios, éramos los demócratas que se supone lucharon y denunciaron al dictador en todos los rincones de la tierra, La solidaridad de estos permitió las condenas que obligaron al dictador a someterse a un plebiscito. Y debió irse. Los exiliados eran perseguidos de verdad, pero hubo grupos que se enraizaron al seudo socialismo europeo. Y olvidaron para siempre los sueños de Allende y los trabajadores. Disfrazaron la justicia social y la recuperación de los derechos propios y los crímenes del dictador, de un accidente de la historia y hoy Chile se apresta a realizar su quinta elección presidencial. Y han aparecido con sangre de mala memoria todo el pasado para que algunos líderes del cambio a más democracia aliándose con la derecha económica y otros más descarados con el Partido que transformó en Dios al dictador sanguinario. Levantaron al candidato Bancard, lo apoyan y rechazan a las nuevas generaciones que se alimentaron con los ejemplos históricos y mantienen subdividido al mundo democrático. Pero además se
matricularon en la férula de algunas naciones ‘progre’ que
alentaron la lucha por la liberación de este país flaco, ribereño
del océano Pacífico, de las alturas de Chile es hoy un país facturado en el alma y trasplantado a un capitalismo no asesino ni golpista pero con sus mismos integrantes, más exitosos y hábiles que venden sus productos y una libertad que reconquistaron los trabajadores. Y hasta pueden decir, los que crearon el monstruo Pinochet, que ellos salvaron a Chile como Obama la sinverguenzura de sus compatriotas banqueros para que se den un baño de decencia y respeto por el ser humano. Chile, por ahora, exporta cifras macroeconómicas con adornos de decencia social. Sin embargo las elecciones parlamentarias y presidenciales de este año pondrán a prueba si la traición logró dañar el alma de este pueblo o bien triunfará el acomodo de traidores con candidatos que al alma le pusieron billetera. Para que eso ocurra, Chile ha contratado a los mejores cerebros calculadores para crear riqueza, perseguir a los ladrones sin zapatos y establecer relaciones comerciales con todos los poderosos de la tierra. La historia se escribe en Chile con una traición casi generalizada de los viejos partidos de izquierda a sus objetivos de pan para ricos y pobres, una igualdad que dejaría libre para construir un país nuevo por dentro y por fuera, como la buena fruta, el producto del trabajo de todos y la propiedad de los bienes de la tierra y del espacio en unánime sueño de padres e hijos. Eso fue así, en el gran sueño de l970. Fallido y traicionado. Con ayuda en inglés y otros idiomas Hoy las futuras elecciones presidenciales en Chile parecen un espectáculo montado por Don King el famoso conocedor de muchas cárceles en USA, como empresario de boxeo. Pero entraremos al ring de los hechos, con las noticias que no se publican y si se publican, no siempre reflejan la verdad de esos hechos. De eso se trata: reportear la verdad. Pero denunciar las traiciones. MGL
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